Vaya partido el de ayer. De nuevo el equipo veterano con menos jugadores. Parece que algunos quieren no volver a jugar. Otros en cambio, debido a males intenstinales no pudieron acudir a la cita. Y que sucede con esto, que despueés de la victoria veterana se oyeron voces de que el cancer del equipo era el sr. Daniel. Incluso suenan campanas de cesión. Pero no se puede hablar solo del sr. marmolista. El otro punta del equipo veterano, aquel que reniega de sus compañeros partido si, partido no, no tiene lo que hay que tener para batir al amigo Andrés. Ya van dos partididos sin mojar, quizás es que todo lo que tiene que mojar lo hace en su casita y para ayudar a sus compañeros viene seco. Eso si, soltar la lengua la suelta bien, pero claro amigo Alvaro, las críticas se callan en el campo, que poco a poco se va usted pareciendo más al sr. Salinas. También pudimos asistir al capítulo tropecientos de Piolín; y es que había una banda donde de vez en cuando resaltaba un amarillo chillón, ese que luce el colega Lucas. ¿Será daltónico este hombre? ¿O se ha perdido el capítulo de Barrio Sésamo donde se enseñaban los colores? Los veteranos vamos de naranja, aunque quien sabe, quizás para ayudarle a distinguir colores habrá que cambiar de color. El sr. Carlos anda en plan relax. "Acabo de llegar de la playa"; no, si no hace falta que lo diga con las pintas que aparece. Quizás es que tiene arenas en los bolsillos de entrenar toda la tarde. Y que decir del hombre de los 2 €, si si, el hombre de los 2 €; y es que no hay partido en el que se tire al suelo a buscar no se que. Unas botitas nuevas amigo Pelu, cante usted eso de unas botitas nuevas que las tengo rotas de tanto jugar, aunque las malas lenguas hablan más bien de el cerro de años que lleva a sus espaldas.

Del equipo junior nombrar solo al sr. Lewis, el toro inglés. Quizás si le comprásemos un balón para él solo se divertiría más.