domingo, 27 de mayo de 2007









Fabián Ortiz
ESTA AFICIÓN NO SE LO MERECE

Tal vez el Barcelona acabe ganando el título, quién sabe. Tal vez consiga los seis puntos que quedan, el Real Madrid se deje algo en el camino y sume su tercera Liga consecutiva. Tal vez vuelva a verse una rúa de celebración por la ciudad, el jolgorio, los bailes y esos parlamentos finales tan reiterativos, pero no por ello menos emocionantes para la masa jaleante (y jadeante). Tal vez ocurra todo eso, y entonces quedará la sensación de que esta afición no se lo merece. Anoche, como la tarde ante el Betis hace quince días, con el equipo jugándose el único título serio de la temporada, el Camp Nou albergó a 64.574 espectadores, lo que significa que ni se acercó a los tres cuartos de su aforo. Era sábado, hacía buen tiempo, el partido se veía gratis y, qué caray, se está tan bien en casa, en la segunda residencia de la playa o la montaña, con la familia o los amigos...La afición culé recibió un buen día el calificativo de "mejor afición del mundo"; debió de bautizarla alguien poco viajado. Capaz de movilizarse masivamente sólo en las grandes finales, ayer demostró también que se le da mejor unirse contra alguien que a favor de su equipo: mientras el Barça estuvo con once, antes de la estupidez de Ronaldinho y de la justa tarjeta roja, el estadio parecía el teatro de siempre, apenas murmurante, nunca entregado en cuerpo y alma. Fue sólo a raíz de la expulsión, que vio con la miopía habitual y juzgó injusta, que comenzó a gritar. Contra el árbitro. Y contra el Getafe. Qué bien.

Nueva aventura del club ciclista la paloma-pipols. En esta ocasión, y tal y como estaba previsto la salida se produjo a las 9:00 de la mañana desde la prolongación de la avenida san Lorenzo con rumbo a los parajes y rincones de nuestra sierra por un sinfín de caminos y rutas para muchos desconocidos. La convocatoria era libre, finalmente acudieron a la misma los cinco aguerridos de la foto, los cuales poseen una capacidad innata para el pedaleo. A última hora fue baja Dani, el cual achaco problemas estomacales a su falta a la concentración. Para la próxima semana es posible que se organice otra nueva etapa.



Aqui posan los cinco pedaleadores con Estepona como fondo y todo el mar mediterraneo decorando unos paisajes de verdadero lujo y envidia de cualquier lugar del mundo.

Descanso en el camino, como si del Rocio se tratase. Unos examinan sus máquinas, otros hacen piruetas y otros simplemente se dedican a charlar.



Tres compañeros de juergas y reuniones a la luz de la lumbre posan para nuestra cámara sin mostrar ningún atisbo de fatiga ni mucho menos cansancio.



Pedro invitó a la cita a la familia y se trajo a su querido primo, el cual demostró que se encuentra un escalón por encima del resto



Miguel fue sin duda el que más sufrió con este recorrido y el agua se la bebía como si fuese un verdadero pelotazo de cacique. Poco a poco llegará la forma esperada.





Estamos en villa Patricio, más conocido como escuela local de alpinismo. Las obras marchan a buen ritmo y dentro de poco el bueno de Patri podrá inaugurar su ansiada escuela de alpinismo, un reto que parecía que no iba a poder alcanzar nunca.







Aqui nos muestra como marchan las obras, con cancelas de última tecnología anti-cabras y cabreros. ¿Estará electrificada?






Pues ahí va, si si si, no hay cuesta que se le resiste y menos en la de la fotografía. La cima más conocida como ascensión a la cumbre de la presidenta, donde fuese como fuese Pedro tenía que subir.









A lo lejos viene un cicista, abran paso, la máquina no puede frenar ni cuesta arriba.








De nuevo Pedro con cara de rabia en la ascensión a la cumbre de la presidenta, la ascensión más dura de todo el recorrido con un desnivel del 20 %, y donde algunos como Miguel y Patri tuvieron que echar pie a tierra.








Incluso Carlos lo paso mal en algunos momentos. Esta cumbre se hace dura hasta para los más preparados.








Una vez recuperado Carlitos aprieta los dientes y se come la cumbre de la presidenta, mientras al fondo Patri agota sus últimos recursos para mantenerse encima de la bici.







Ya en lo alto es momento de charla y de organizar los siguientes caminos.










Desmadre a babor
• ¿Qué pasaría si treinta novios y novias celebraran juntos su última gran juerga antes del gran día? Eso ocurre cada semana en ‘El barco de las despedidas’, un guardacostas francés de 1947 ‘anclado’ en las turbulentas aceras de un polígono industrial de Mataró (Barcelona).


Son las diez de la noche de un sábado cualquiera. Centenares de personas embarcan en un imponente guardacostas en Mataró (Barcelona). Nada extraño de no ser por unos sorprendentes detalles. Uno: el barco no está en el puerto sino que permanece atracado ¡en medio de un polígono industrial! Y dos: la mayoría de las pasajeras llevan penes (de plástico o peluche) en la cabeza, colgados del cuello o en cualquier otra parte de su anatomía. Entre los chicos destacan algunos por sus atrevidas y nada elegantes indumentarias: Alberto lleva un maillot de pantera con un tutú de bailarina por el que le asoman sus atributos, afortunadamente a resguardo bajo los calzoncillos; Jose parece una muñeca chochona vestido completamente de rosa (minifalda y peluca incluidas): “El cabrón de mi cuñado me ha vestido así”, se queja avergonzado; otro lleva un delantal del que a la altura de la pelvis le cuelga una especie de manguera color carne que casi le arrastra... No hay duda, semejante fauna sólo puede celebrar una cosa: sus despedidas de solteros. Hasta 700 personas se desmelenan cada _ n de semana en El barco de las despedidas (www.despedidasenbarco.com), una de las opciones con más éxito para correrse la última juerga antes de pasar por la vicaría. Desplazamiento en autobús, cena (entremeses y pollo) con sangría, postre erótico, una copa y estriptis por 60 euros, aunque hay otros precios, según necesidades. “Del barco de Chanquete, no nos moverán”, cantan las 23 chicas de la mesa de la despedida de Noelia, que van ¿vestidas? de mariquitas. “Hemos venido aquí porque el año pasado me lo pasé muy bien. Pillé una cogorza increíble y los estríperes están muy bien”, relata la amiga encargada de organizar la sorpresa. Los invitados de cada despedida se van mezclando, se tiran panes, servilletas, se piropean, se nota que hay buen rollo... “Nunca hemos tenido ni una pelea y sí mucho cariño; una pareja que se conoció aquí acabó casándose, un camarero se casó con una clienta. Aquí el que no liga es porque no quiere”, cuenta Encarni Vargas, gerente de este negocio familiar que creó su padre hace doce años. Cuando el ambiente ya está caldeado y las jarras de sangría comienzan a hacer efecto, llega la hora del postre. Los novios son agasajados con una dulce vagina, y ellas con un pene (ambos de chocolate, claro) con un elegante toque de nata en la punta. “¡Vaya aparato! Esto no se ve todos los días... La de mi chico es más pequeña”, dice una exaltada novia cuyo nombre ocultaremos para no humillar a su futuro esposo. En una mesa, un grupo sin disfraces ni adornos parecen bastantes calmados, hasta que pasan por su lado dos chicas con las faldas muy cortas y las piernas muy largas... Los modales se pierden, comienzan los piropos y el novio acaba descamisado. Y tras la cena, estriptis privado para el que lo contrate. “Si te hubiera pillado con unos años menos, te ibas a enterar”. Lejos de ruborizarse, María Luisa, setentona, y suegra de la novia, no se corta ante el estríper que se ha sentado encima de ella con sólo un tanga. Mientras, en la discoteca del barco comienza la marejada con aires de fuerte marejada... Y si de una boda –dicen– sale otra boda, de una despedida, en este barco puede salir... cualquier cosa.



Alfredo Relaño
ESTA LIGA ES DE LAS QUE DEJAN MONO



La gane quien la gane, esta Liga no la vamos a olvidar. La tarde de ayer pasó en un grito, y hoy vuelve a la carga el Sevilla, que recibe al Zaragoza. El Sevilla necesita que fallen los dos de arriba, pero está dispuesto a creer. Y los de arriba no están dispuestos a ceder. Eso sí: el Valencia cedió ayer, con lo que da entrada al Villarreal en lucha franca por la UEFA, lo que complica otra zona del campeonato. Y abajo hierven también las pasiones, con dos clásicos como el Athletic y la Real metidos en problemas con los que no contaban al empezar la temporada. Una Liga para estrujar esas emociones únicas del fútbol.Madrid y Barça tuvieron sendos huesos duros de roer. ¿Primas de terceros en ambos casos, o amor propio del que se siente despreciado porque se le adjudica un nivel de mero comparsa? Tanto da. En cualquier caso es bueno que la Liga se decida con partidos íntegros, en los que las victorias cuestan y son de verdad, no con partidos en los que uno de los dos tiene calmadas las ambiciones y no opone nada. A las aficiones de los equipos aspirantes suele irritarles que sus enemigos desahuciados jueguen a fondo y metan la pierna dura. Pero cuando acaba el partido y ganan, han ganado un partido de verdad.De verdad fue el del Bernabéu y de verdad fue el del Camp Nou. El Madrid alternó modorra con arreones, como suele hacer. Parece que si no está en peligro no se moviliza. Y lo mismo le ha ocurrido al Barça, que sólo desde que es segundo en la 'foto finish' ha recobrado la garra y el interés, y eso sin demérito de su calidad. Su lucha con diez contra un Getafe bueno, sobrio y consciente, fue tan digna de encomio como merecedora de crítica la reacción rabiosa y sin justificación de Ronaldinho, que puso en jaque a su equipo y al pobre Pérez Burrull, tan nervioso que se le cayó la tarjeta. En fin: continuará.


que el futuro es muy oscuro, que el futuro es muy oscuro, ayyyy, trabajando en el carbón

 
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