Gaby Milito Gabriel Alejandro Milito
Nació en Bernal (Buenos Aires), el 9 de Julio de 1980. Estaba claro que el destino de la familia estaba inexcusablemente ligado al fútbol. Diego su hermano mayor; nació el 12 de junio de 1979, también en Bernal, provincia de Buenos Aires y pronto dejó constancia de que tenía aptitudes para ser futbolista, pero a diferencia de Gaby, se desenvolvía mejor en la delantera, donde ha dado muchas tardes de gloria a la Academia (Racing de Avellaneda). Cuando Diego tenía nueve años y Gaby ocho jugaban juntos en el club Viejo Bueno de Quilmes. Sus padres los llevaron a probar a Independiente. Pero resultó que Diego no pudo ir a un partido y decidió que no iba a ir nunca más. En cambio Gaby se quedó y al año siguiente, llevaron a Diego a probar a Racing y lo ficharon. Posteriormente su madre trató de convencer a Gaby, entonces en Independiente, para que su padre pudiera ver a sus dos hijos en un mismo club. Al final le hizo caso y lo llevaron a Racing. En diciembre del 94, Diego estaba en la Novena y Gaby terminaba en Infantiles, Racing cambió de cancha de entrenamiento y a Gaby le resultaba muy difícil acudir por lo que sin dudarlo se marchó a Independiente, que quiso llevarse a Diego para reunir nuevamente a los dos hermanos, pero Racing finalmente no le dio el pase. Debutó en Primera con Independiente de la mano de César Luis Menotti, en el Apertura 97, el 21 de diciembre de 1997, en un partido Independiente 2-0 Ferro, Gaby entró a los 43 minutos del segundo tiempo. A partir de aqui se va asentando y con apenas 19 años, en 1999 se convierte en la figura de Independiente, recibiendo elogios de propios y extraños, en Argentina y en el extranjero. En 1999, el Olympique de Marsella intentó ficharle y ofreció cuatro millones de dólares, pero Milito, que tenía 19 años, se negó a irse del país al alegar que era demasiado joven. Más tarde surgieron las posibilidades de que pasara a la Roma.Milito sigue quemando etapas y es pretendido en 2001 por el Zaragoza pero Gaby prefiere quedarse en Independiente. Posteriormente el 25 de marzo de 2001, pasa por uno de los peores momentos de su carrera, el chaval sufre la rotura de ligamentos cruzados y menisco externo de su rodilla derecha que lo tiene apartado muchos meses de los terrenos de juego.A su vuelta muy pronto acalla las voces de los que lo querían retirar y demuestra ser el mejor central de la liga argentina lo que le supone que media Europa siga sus evoluciones y puje fuerte por su fichaje. Cuando las aguas parecían volver a su cauce, Milito vive uno de los momentos más delicados de su vida, concretamente en Agosto del año 2002, en el que su padre fue secuestrado. La noticia impactó fuertemente en Argentina y de ella se hizo eco toda la prensa; el Diario Clarin en concreto informó de la siguiente manera:El padre de los futbolistas Gabriel y Diego Milito fue secuestrado en La Cañada, partido bonaerense de Quilmes, y sus captores habrían pedido 500 mil pesos de rescate, informaron fuentes policiales. Fuentes cercanas a ambos clubes de Avellaneda señalaron que Jorge Milito fue secuestrado hoy en Quilmes, localidad situada a unos 20 kilómetros al sur de la capital argentina, por cuatro personas que le obligaron a subir al coche en el que se movilizaban. Afortunadamente la historia tuvo un final feliz y Jorge Milito fue liberado unos días después, tras la negociación que mantuvo Issa (el representante de los hermanos Milito) y los secuestradores.Comenzó a destacar en las selecciones sub17 y sub23 dirigidas por José Pekerman, quien en reiteradas ocasiones dijo que se trataba de "un jugador distinto". En 1999 se proclamó campeón del Torneo Sudamericano sub20 con Argentina. Posteriormente asombró con la selección sub20 eliminada del preolímpico de Brasil. Con la Selección absoluta ha jugado cuatro encuentros hasta la fecha.Antes de su marcha al fútbol europeo hizo campeón a Independiente, al que lideró desde su defensa y como capitán del equipo en la victoria en el Apertura de 2002.El "Tolo" Gallego, cuando se supo el presunto interés del Madrid por Gaby, dijo de él: "el Madrid puede que tenga a los mejores jugadores del Mundo pero no tiene a Milito", algo que estuvo muy cerca de producirse. Media Europa lo venía siguiendo, especialmente Madrid, Barcelona y Roma y finalmente en julio de 2003, cumpliendo uno de sus sueños, el gran defensa argentino fue transferido por 3,5 millones de euros al Real Madrid. Pero curiosamente su gran sueño se convirtió en una pesadilla, puesto que cuando fue sometido al reconocimiento médico, los servicios médicos desaconsejaron su fichaje por problemas en la rodilla. En medio de una gran polémica y un debate entre galenos, se quedó a las puertas de recoger el testigo de Fernando Hierro.Aún así el bravo defensa argentino se fue con la cabeza bien alta y afortunadamente para todos, el Zaragoza se hizo con sus servicios tras pasar el reconocimiento médico al que fue sometido por D.Pedro Guillén, toda una eminencia en la materia.Su debut en la liga española se produjo el 31 de agosto de 2003, en un Zaragoza 0-1 Deportivo.En las filas del Zaragoza, Milito pasó página y se centró en darlo todo en el conjunto maño, donde demostró quién llevaba la razón en este curioso caso. El 17 de marzo de 2004 se tomó su particular venganza al derrotar al todopoderoso Real Madrid en la final de la Copa del Rey, en la que junto a compañeros como Savio, Movilla, Dani, Galleti y Villa vencieron 3 a 2 al conjunto merengue. Milito desplegó nuevamente aquel juego de anticipación, potencia y personalidad que le llevaron a estar considerado como uno de los mejores centrales del mundo y que le valieron el apodo de "El Mariscal". De esta forma cumple uno de sus sueños al conseguir su primer título en Europa nada más “aterrizar” en el fútbol europeo. Tiene firmado un contrato con el Zaragoza para las cuatro próximas temporadas (otra opcional) a razón de 750.000 euros por cada una de ellas, aunque si sigue ofreciendo el nivel que está exhibiendo en la liga española, no tardará en ser tentado por los grandes del fútbol europeo. Al respecto parece ser que la Juve, lo sigue muy de cerca y está siguiendo con mucho interés las evoluciones del argentino.
