SEGUNDA DERROTA Y CON EL RUMBO ALGO PERDIDO
El equipo tenía la oportunidad de resarcirse de la derrota ante el Automóviles David Márquez pero la tarde no fue precisamente positiva y el rival supo llevar el partido a su terreno y sumar tres puntos que le meten de lleno en el grupo de cabeza y pone la liga de lo más apasionante.
Y hay que decir que el equipo de nuevo empezo adelantándose en el marcador. Y de nuevo se dejó remontar cuando lo que siempre había caracterizado a este grupo en las primeras jornadas era su capacidad defensiva. No en vano hay que decir que hemos encajado más goles en estos dos partidos que en los cinco anteriores, un dato a tener en cuenta. El equipo parece haber perdido chispa, se nota nerviosismo y cierta ansiedad que no ayuda en nada a volver encontrar la senda de la victoria. En primer lugar tengo que reconocer que quizás el primer el error lo cometí yo al intentar ganar el partido demasiado pronto e intentar volcar al equipo desde el principio intentando dominar al rival desde el principio metíendolo en su campo con una fuerte presión que en muy pocas ocasiones se llegó a realizar, motivado quizás por no situar correctamente a los jugadores en el campo. Aparte de esto faltó intensidad, mordiente por recuperar el balón. La semana anterior se perdió ante el Automóviles porque estos iban a dos velocidades más que nosotros, y esta porque no hemos sabido controlar un partido que con el uno a cero a nuestro favor deberíamos haber traido a nuestro terreno.
Pero no hemos sido capaces de hacerlo y nos han bajado de la nube con dos mazazos ante rivales directos. Toca trabajar, pelear e intentar volver a ser los mismos de principios de temporada, o simplemente los mismos que hemos dado el callo en entrenamientos ante rivales de mucha más entidad a los que nos hemos medido en liga.
Respecto al partido decir que la primera mitad fue muy mala, muy descoordinada, una falta de acoplamiento inhabitual y falta de comunicación entre los jugadores. Somos un equipo y tenemos que actuar como tal. De nada sirve mosquearse porque un compañero haga algo mal, al contrario, es el momento de animarlo y mostrar confianza en él como pieza del equipo que es. Se necesita mayor sacrificio en el campo, y más cuando sabemos que en el banco hay esperando varios compañeros esperando su oportunidad. El tiempo que se esté sobre el terreno de juego hay que estar al cien por cien.
Al final la primera mitad acabó con el resultado de dos uno a favor del automóviles.
En la segunda el juego mejoró mucho. Tuvimos el balón y fuimos superiores. Se volvió al sistema habitual y tocamos y tocamos, aunque eso si, faltó pegada y acercamientos más peligrosos. Llegó el tres a uno a su favor en un lanzamiento de falta que dejó al equipo de nuevo tocado. Pero a pesar de eso se consiguió el tres a dos, de nuevo a un gol. Pero a pesar de tener el balón faltaba pegada, seguíamos sin crear peligro claro arriba. Al final cuatro a dos en una nueva contra rival. Fin del partido y malestar general.
