domingo, 13 de mayo de 2007
LOS SALTOS DE RAÚL, LOS SALTOS DE JUANITO...
Marcó Higuaín y fue el delirio. Se despojó de la camiseta y Van Nistel-rooy la mostró al público. Capello, en un toque de 'finezza', sustituyó a Raúl, que se marchó dando brincos que me quitaron unos años de encima, porque recordaron a los de Juanito una lejana noche de remontada europea ante el Borussia. Remontada, esa es la palabra favorita del madridismo hoy. Remontada de posiciones en la Liga, remontada del Getafe al Barça, con el daño moral que eso suponga, remontada ante un Espanyol que castigó primero la confianza del Madrid en la primera parte, y luego luchó fieramente por el resultado.Porque el Madrid empezó mal, jugando en una sola dirección: hacia arriba. Y Guti puso esta vez la cara B. Y Cicinho a un lado y Roberto Carlos al otro abandonaban simultáneamente la posición. Y Cannavaro tiene en la estantería unos premios a los que no hace honor desde que llegó al Madrid. Todo junto era 1-3 al descanso, los tres de Pandiani, el Bernabéu estupefacto, la Liga que se escapaba. El Espanyol jugaba con soltura, relajado, preciso, divertido, deslizándose cómodo por el tobogán que la descolocación del Madrid le ofrecía. Tres goles, Casillas sin tocarla y al descanso.Entonces sonaron los tambores y el Madrid, mejorado con los cambios, fue un tornado. Y alcanzó dos goles enseguida. Entonces llegó la mayor angustia: el Espanyol que se crece, Emerson y Diarra que acusan los golpes y la fatiga, el Madrid que se desmembra. Pelotazos al vacío, ataques ordenados del Espanyol, Casillas salvando, de mucho un mucho un corner en el que agarran a Sergio Ramos. Y cuando todo terminaba, el gol. El Bernabéu que bota, la camiseta de Higuaín, Raúl... Grandioso. No sé cómo acabará todo esto, pero el Madrid ya ha recuperado algo que perdió hace tiempo: el orgullo.
PASTEL ERÓTICO
Ingredientes:
2 ojos sonrientes
2 bonitas piernas
2brazos cariñosos
2 recipientes firmes de leche
2 huevos
1 bol para mezclar ingredientes
1 plátano duro
Proceso:
Mira a los ojos sonrientes. Separa las bonitas piernas con los cariñosos brazos. Aprieta y masajea los recipientes de leche muysuavemente hasta que el bol esté húmedo. Compruebavarias veces con un dedo. Añada con cuidado el plátano al bol. Sacándolo ymetiéndolo hasta que el movimiento sea fluido (a puntode caramelo). Si no se conoce bien la marca del boluse algún impermeabilizante para su esterilización(para mejor resultado de la salsa, sigue masajeandolos recipientes de leche). Mete el plátano hasta dentro del bol y cúbrelo con loshuevos, déjalo reposar (no toda la noche). El pastel está hecho cuando el plátano se pone blandoy el bol se queda frío. Si el plátano no se poneblando repite los pasos 3-5.Nota: Si trabaja en una cocina desconocida, lava lasherramientas con cuidado antes y después del uso.
'El Loco' Gatti
EL GOL QUE MARCÓ HIGUAÍN NO ES UNO MÁS: SIGNIFICA LA LIGA
Se habia desatado la euforia de tal manera, que al presidente se le iba helando la sonrisa en el palco a medida que Pandiani iba descosiendo las redes de Casillas. El primero fue un susto; el segundo:una bofetada; pero cuando llegó el tercero aquello amenzaba tormenta. Y, sin embargo, una buena parte de la hinchada seguía en el descanso confiando en el equipo. Acaso porque la gesta del Getafe estaba a flor de piel y había supuesto, también, una victoria para el madridismo, y tal vez porque el aficionado merengue le ha perdido ya el miedo a todo después de tantas frustracciones. Todos menos Victoria Beckham, que se pasó el partido al lado de su excitado esposo haciéndonos dudar de si trataba de ella o era sólo una cariátide romana.Se demostró, eso sí, que el fútbol es un estado de ánimo, y que esas cosas de los calendarios, del rival, de los cálculos y de las estretegias son pura mentira. Parecía, a priori, el partido más fácil para el Madrid y se hubiera convertido en una verdadera pesadilla si los blancos no hubieran echado mano de ese espíritu prodigioso queparece haber contagiado a sus jugadores. Al final se llegó a la conlusión de que tanto da si juega Guti o no, de si sale Reyes o Robinho, de si con Emerson y Diarra se vuleve al doble bolardo; tanto dió que R.Carlos jugase como si quisiera ganarse la renovación, o que Cannavaro y Ramos fueran un desastre en defensa, o que hubiera que volver a redimir a Helguera. Los argumentos que hace bien poco se le asrrojaban a la cara a Capello son utilizados ahora para pedirle que se quede. Justo ahora que ya está apalabrado Schuster, que tiene mandanga la cosa.La angustia del Madrid ante un Español soberbio en ataque y lamentable en defensa debiera servir de lección para lo que queda. Porque ni el Barcelona está para los cocodrilos, ni el Madrid va a seguir ganando solo por apelar a conjuros y exorcismos.