Puffff, y mil veces Puffff. Vaya partidito. La verdad es que todo hacía presagiar el esperpento vivido en la noche de ayer. A la consabida ausencia de portero en los veteranos, se sumó la de Volkov, Dani y Juanda. Y para rematar la faena tampoco compareció Aguilar, con quien si se contaba. De los presentes en el lado veterano que decir; volvió a aparecer el Rey Carlos, muy generoso él, estuvo muy caritativo y dio más de un regalito sin premio a cambio. El amigo Pelu, que a pesar de seguir ondeando su cola al viento cual apache en su semental, no consiguió volver a hacer hat-trick, pero al menos no se cayó; parece que la inversión en las botas le están dando sus frutos. Alvaro, que decir del siempre polémico Alvaro. Para empezar aparece con pinta de barriobajero con camiseta sin mangas y para rematar de color blanco. Parece que se quiere solidarizar con el hombre de la banda, al que solo falta que le monten un adosado para que no se tenga que mover de allí. Si, el sr. Lucas, el cual apareció vestidito de amarillo chillón, para no destacar. Esto empieza a ser una ONG del color. Al menos Volkov tuvo la decencia de mandar al amigo Francisco, el cual hay que reconocer no está en su mejor momento físico pero que le puso lo que pudo, que tampoco es que fuera para nota. Y como parece ser que cuando uno no se nombra es el malo, decir que como viene siendo habitual fui el motor del equipo y que con cada partido que pasa uno se nota cada vez más paquete, y es que como el resfriado ese virus parece pegarse. No es de extrañar que en breve lleguen ofertas del extranjero, porque lo que es al alvarito y al luquinho no hay quien los coloque. El resultado ni nombrarlo. Pero lo que si es para nombrar es la clase magistral que dio el sr. Lucas de como desaparecer de un partido que no le interesa jugar, aunque para ello tenga que dejar a sus compañeros tirados como colillas.

EL CAUDILLO DEPORTIVO