El Estepona ha cosechado su tercera victoria de la temporada, segunda consecutiva en el Muñoz Pérez. En esta ocasión el rival ha sido el complicado Vera, un equipo con buenas referencias y que ha dado muestras de ser un equipo bien formado, aunque delante ha tenido a un equipo esteponero muy eficaz y con las idéas muy claras. No se ha producido el ansiado debut de Catanha, que tiene el complicado papel de convertirse en el ídolo de la afición. Una afición que parece haberse enganchado al equipo y que poco a poco acude en mayor número a ver al equipo de nuestro pueblo, y todo esto a pesar de lo malo de la hora, las 12 de la mañana, un horario que según los comentarios oidos en la grada no es el mejor para ver un partido de fútbol.

La primera parte ha comenzado con un continuo tanteo de un equipo a otro, con mucho respeto, destacando la fuerte presión que ejerce el equipo de Procopio en el centro del campo, lo que le permite recuperar el balón evitando así posibles ocasiones del rival. El primer gol, y único en esta primera parte ha llegado en jugada personal del delantero centro dentro del aréa, quien tras regatear a un rival éste le ha derribado provocando un penalty que ha materializado el punta esteponero. Tras este gol el partido ha entrado en una fase monótona en la que los dos equipos parecía dejar pasar el tiempo y con mucho juego de centro de campo y poco toque. Las únicas y escasas ocasiones han llegado siempre del lado rojillo. Destacar de esta primera parte la expulsión de un jugador visitante lo que auguraba mayores facilidades para los locales.

La segunda parte ha comenzado con la misma tónica aunque se respiraba un segundo gol del Estepona. Un segundo gol que se hizo esperar pero que trajo la calma tanto en el terreno de juego como en el graderio. Con el segundo gol todo quedaba visto para sentencia y solo quedaba esperar si llegaban más goles y más aun cuando el equipo del Vera se quedó con nueve jugadores, y es que si algo ha habido hoy sobre el campo han sido tarjetas. Recital del sr. colegiado que parecía tener un muelle y a la mínima amonestaba a los jugadores. Finalmente han llegado dos goles más dejando el marcador en el definitivo 4-0, un resultado que hace soñar a la afición. En estos momentos el equipo esteponero se mete en la pomada de la liga y todo ello a pesar de conformar el equipo prácticamente sin tiempo. Ahora espera el arenas de Armilla, un rival que está en los puestos bajos, pero que seguro hará sufrir a los nuestros.

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