LA CRONICA
En la noche de ayer pudimos disfrutar de un nuevo partido entre junior y veteranos. Para empezar tenemos que decir que los veteranos se presentaron al choque con lo puesto. Le falló sobre todo el pelu, hombre ya fijo en todas las convocatorias; y por otro lado el intento de la directiva veterana por traer a uno de sus recursos en caso de falta de jugadores tampoco dio sus frutos, no se consiguió traer ni a Jesus ni a Cuaresma, con lo que se presentaron en el San Fernando con seis jugadores, un equipo de circunstancias formado por lo que es la base de esta sección del Pipols. Para solucionar el problema los juniors cedieron para el encuentro a Jaime, central de los juniors, que por voluntad propia, y ante la falta de decisión de sus compañeros, decidio compartir camiseta con los veteranos. Con estos antecedentes dio comienzo el choque. Los veteranos, como viene siendo habitual, y ante los pocos recursos disponibles se atrincheraron atrás en busca de sus ocasiones a la contra e intentando, en la medida de lo posible, sujetar lo que sabían que iba a ser un empuje continuo por parte de los jovenes del junior. Y así fue. Los juniors se hicieron con el control del cuero, mientras los veteranos esperaban en las inmediaciones de su area para robar algún balón y salir a la contra. En un principio dicho sistema le dio resultado a los veteranos, ya que los juniors no estaban acertados de cara a gol y tampoco conseguían alcanzar la meta rival con facilidad. Ante esta situación, en una de las citadas contras los veteranos consiguieron adelantarse en el marcador, resultado que dolía a los juniors puesto que tenian controlado el tempo de partido y solo les faltaba el gol. Pues bien, consiguieron el empate, lo que hacía que aun aumentaran más si cabe su presión sobre la zona defensiva de los veteranos. Cuando más empujaban los juniors, llegó el segundo gol de los veteranos, que les volvía a poner por delante en el marcador 2-1. A partir de aquí ya todo empezó a cambiar, y la balanza pocoa a poco empezó a inclinarse cada vez más hacia el lado junior. Tal es el caso que consiguieron de nuevo empatar, y una vez hecho esto todo fue coser y cantar, puesto que los goles se fueron sucediendo poco a poco sin que los veteranos tuvieran ninguna posibilidad de reacción. Les falta olfato goleador y más clase a la hora de tener el balón en su poder. El tercer gol veterano ya solo fue un espejismo, puesto que el partido había quedado sentenciado bastantes minutos antes. En fin, los veteranos, como viene siendo habitual hacen una primera media hora, o incluso cuarenta y cinco minutos de buena concentración y situación en el campo que es el único tiempo del partido donde los juniors encuentran algo de dificultad. Una vez transcurrido este tiempo todo parece una balsa de aceite para los junior que a base de presión, mayor capacidad ofensiva y mayor capacidad física se hacen con el partido y consiguen, como en este encuentro, con un resultado abultado. Se hace notar la falta de un hombre rematador y rápido en la punta de ataque que desequilibre la zaga de los juniors. Ni la presencia de Jaime en los juniors pudo hacer que el partido se decantara a su favor. Conclusión, fue un partido quizás algo anodino, muy diferente al vivido la semana anterior donde la rivalidad fue mucho mayor. Partido sin ton ni son, parecía un amistoso de barriada, sobre todo en la ultima parte del encuentro donde la intensidad bajo mucho y no había nada de tensión.
A la espera de la proxima jornada donde la rivalidad esperemos sea mucho mayor, un saludo,
Miguel.
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