Andoni Cedrún Ibarra nació en Durango (Vizcaya) el 5 de junio de 1960 en una familia de tradición futbolera, pues su padre Carmelo había defendido la portería de San Mamés durante 15 años. Para el que no conozca a nuestro homenajeado de hoy, podría parecer que Cedrún llegó a primera división gracias a su apellido, pero lo cierto es que a lo largo de las 17 temporadas que se mantuvo en la máxima categoría le dio tiempo a convertirse en uno de los clásicos del fútbol español de las décadas de los 80's y 90's.
Cedrún debutó a los veinte años con el Athletic Club y logró ganarse la titularidad en 21 ocasiones durante la temporada 80/81. Las dos campañas siguientes vivió a la sombra de otro clásico como Zubizarreta, y aunque apenas dispuso de oportunidades sí se permitió el lujo de inaugurar su palmarés ganando la liga 82/83. A pesar de ello en verano de 1983 se marchó al Cádiz en busca de los minutos que se le negaban en Bilbao, y que en parte puede decirse que sí que consiguió.
En septiembre de 1984 inició su andadura en el Real Zaragoza, que a la postre sería el club de su vida. Se pasó en la capital aragonesa nada menos que doce temporadas, siendo titular en todas y cada una de ellas a excepción de dos que le robó José Luis Chilavert. En todos eso años conquistó con su equipo dos Copas del Suegro de Letizia (?) y la mítica Recopa de Europa recordada por el gol de Nayim en la final ante el Arsenal, además de convertirse en un ídolo en La Romareda por heroicas actuaciones como la de aquel partido en el Bernabeu en 1987, cuando a pesar de estar sangrando abundantemente por la cabeza, quiso seguir a toda costa sobre el campo ayudando a sus compañeros. La temporada 95/96 se la pasó casi entera en la grada, viendo como otros más jóvenes que él como Juanmi o José Francisco Belman ocupaban las plazas en el césped y en el banquillo respectivamente, lo que motivó que buscase un sitio donde le dieran minutos para afrontar su última temporada en activo.Ese sitio lo encontó al lado de un viejo conocido como el Tato Abadía en el Logroñés, donde a pesar de no ser un fijo en el once, sí disputó sus buenos 14 partidos en liga con los que abandonó el fútbol profesional con un buen sabor de boca, con nada menos que 37 años y cerca de 400 partidos entre Liga, Copa y competiciones europeas. En la actualidad reside en Zaragoza y de vez en cuando se le puede encontrar ejerciendo de comentarista en la televisión aragonesa. Lo dicho, un grande del fútbol y no sólo por su estatura...
Cedrún debutó a los veinte años con el Athletic Club y logró ganarse la titularidad en 21 ocasiones durante la temporada 80/81. Las dos campañas siguientes vivió a la sombra de otro clásico como Zubizarreta, y aunque apenas dispuso de oportunidades sí se permitió el lujo de inaugurar su palmarés ganando la liga 82/83. A pesar de ello en verano de 1983 se marchó al Cádiz en busca de los minutos que se le negaban en Bilbao, y que en parte puede decirse que sí que consiguió.
En septiembre de 1984 inició su andadura en el Real Zaragoza, que a la postre sería el club de su vida. Se pasó en la capital aragonesa nada menos que doce temporadas, siendo titular en todas y cada una de ellas a excepción de dos que le robó José Luis Chilavert. En todos eso años conquistó con su equipo dos Copas del Suegro de Letizia (?) y la mítica Recopa de Europa recordada por el gol de Nayim en la final ante el Arsenal, además de convertirse en un ídolo en La Romareda por heroicas actuaciones como la de aquel partido en el Bernabeu en 1987, cuando a pesar de estar sangrando abundantemente por la cabeza, quiso seguir a toda costa sobre el campo ayudando a sus compañeros. La temporada 95/96 se la pasó casi entera en la grada, viendo como otros más jóvenes que él como Juanmi o José Francisco Belman ocupaban las plazas en el césped y en el banquillo respectivamente, lo que motivó que buscase un sitio donde le dieran minutos para afrontar su última temporada en activo.Ese sitio lo encontó al lado de un viejo conocido como el Tato Abadía en el Logroñés, donde a pesar de no ser un fijo en el once, sí disputó sus buenos 14 partidos en liga con los que abandonó el fútbol profesional con un buen sabor de boca, con nada menos que 37 años y cerca de 400 partidos entre Liga, Copa y competiciones europeas. En la actualidad reside en Zaragoza y de vez en cuando se le puede encontrar ejerciendo de comentarista en la televisión aragonesa. Lo dicho, un grande del fútbol y no sólo por su estatura...
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