Donde está su magía? Donde está su acierto goleador? Donde está ese olfato de gol dentro del area? Estas y otras muchas preguntas se hacen millones de afionados del mundo cuando se nombra al protagonista en cuestión, el sr. Daniel Navarro.
Para muchos es ya un jugador obsoleto, es decir, acabado. Su época de esplendor pasó hace ya mucho tiempo y ahora debería dedicarse a la cacería que es una de sus grandes aficiones, porque lo que es cazar un gol como ya parece venirle grande.
Otros muchos dicen que perdió su época dorada practicando el deporte nacional, levantador de peso en barra fija. Esto ha hecho mella en su final de carrera deportiva y ahora su rendimiento no da para más. Todo es opinable, aunque bien es cierto que ve un par de burbujas y se vuelve loco.
Su cotización está a la baja y son continuos los ataques de su sección a la hora de cuestionar su puntería de cara a gol. Para muchos engañar a cualquier club y meterle este paquete sería una solución muy rentable para el club. Lástima de su contrato vitalicio, porque la idéa ha rondado la cabeza de la directiva del club.
Será cosa de la edad o será que está en baja forma. Hay ingredientes que si se mezclan son realmente explosivos. Si le preguntáramos a Tito Andrés, hombre muy conocedor del fútbol de su sobrino quizás tendríamos una idéa más clara de lo que le pasa al amigo Dani. ¿O es que siempre ha sido igual? Esperamos hacer una entrevista a fondo en las ya famosas crónicas de Andrés con Dani como tema central de la misma.
Y es que si es cierto que podría empezar a pensar en dedicarse a su trabajo, su cacería y su niña, ya está bien de fantasmadas. Para fantasmas ya tenemos al amigo Marín (ta tocao pisha). Lo mismo te saca una mano por aquí, lo mismo te agarro, lo mismo remato puerta vacia y la mando al carajo. Este es nuestro delantero centro Daniel.
Para muchos es ya un jugador obsoleto, es decir, acabado. Su época de esplendor pasó hace ya mucho tiempo y ahora debería dedicarse a la cacería que es una de sus grandes aficiones, porque lo que es cazar un gol como ya parece venirle grande.
Otros muchos dicen que perdió su época dorada practicando el deporte nacional, levantador de peso en barra fija. Esto ha hecho mella en su final de carrera deportiva y ahora su rendimiento no da para más. Todo es opinable, aunque bien es cierto que ve un par de burbujas y se vuelve loco.
Su cotización está a la baja y son continuos los ataques de su sección a la hora de cuestionar su puntería de cara a gol. Para muchos engañar a cualquier club y meterle este paquete sería una solución muy rentable para el club. Lástima de su contrato vitalicio, porque la idéa ha rondado la cabeza de la directiva del club.
Será cosa de la edad o será que está en baja forma. Hay ingredientes que si se mezclan son realmente explosivos. Si le preguntáramos a Tito Andrés, hombre muy conocedor del fútbol de su sobrino quizás tendríamos una idéa más clara de lo que le pasa al amigo Dani. ¿O es que siempre ha sido igual? Esperamos hacer una entrevista a fondo en las ya famosas crónicas de Andrés con Dani como tema central de la misma.
Y es que si es cierto que podría empezar a pensar en dedicarse a su trabajo, su cacería y su niña, ya está bien de fantasmadas. Para fantasmas ya tenemos al amigo Marín (ta tocao pisha). Lo mismo te saca una mano por aquí, lo mismo te agarro, lo mismo remato puerta vacia y la mando al carajo. Este es nuestro delantero centro Daniel.SOLO LE PODEMOS DESEAR MUCHA SUERTE Y QUE RECUPERE SU OLFATO GOLEADOR LO ANTES POSIBLE, Y ES QUE SU SECCIÓN LO NECESITA SI QUIERE VOLVER A RECUPERAR SU ALTO NIVEL DE JUEGO.
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