EL MÁLAGA EMPATA CON EL GRANADA 74 DE TAPIA EN UN DUELO EQUILIBRADO

El Málaga Club de Fútbol ha empatado (1-1) en el Estadio La Rosaleda, frente al Granada 74, en la 20ª jornada de la Liga BBVA. Partido disputado y con alternativas en el cual los de Tapia fueron un duro adversario lo suficientemente correoso como para impedir el triunfo blanquiazul. Salva Ballesta, en una acción de ariete puro, adelantó al cuadro malaguista marcando su séptimo gol liguero (1-0, min. 13). El malagueño Javi Guerra igualó el choque poco después, poniendo las definitivas tablas en el electrónico (1-1, min. 20). El colegiado catalán Miranda Torres no concedió un gol legal a Apoño (min. 2) y perdonó dos veces en el segundo tiempo la expulsión al visitante Francisco. 13.970 espectadores vieron en Martiricos como el líder de Segunda sumó su punto número 40 en el campeonato.
Finalizada la penúltima jornada de la primera vuelta del presente ejercicio Málaga (1º, 40 puntos), Numancia (2º, 39 puntos) y Sporting (3º, 32 puntos) siguen una semana más en puestos de ascenso a Primera División. Eso sí, recortan diferencias Elche (4º, 32 puntos) y Real Sociedad (5º, 31 puntos), principales perseguidores en lo alto de la tabla.
Primer tiempo cuyo arranque fue de claro dominio local, plasmado con un gol tempranero de Apoño (minuto 2) al saque de una falta. Sin embargo, por segunda semana consecutiva tras el tanto anulado a Hidalgo en Cádiz, el árbitro a instancias de su asistente invalidó el que debía haber significado el parcial 1-0 por fuera de juego inexistente del jugador de La Palmilla. Aun así, los de Muñiz intensificaron sus llegadas, sobre todo por una banda izquierda donde Calleja era el amo, y fruto de una buena acción ofensiva la pelota llegó a Salva, que como vulgarmente se dice "mandó a comprar tabaco" a dos defensores en el área y colocó con maestría el esférico en la portería del 74. Golazo de '9' nato.
A partir de ahí los pupilos de Tapia crecieron en el césped -en buen estado- de Martiricos, a base de un juego rápido a dos o tres toques y de jugadas de estrategia en las que ponía en jaque a la zaga blanquiazul. De un pelotazo largo orientado y una posterior prolongación en las proximidades del portal de Goitia llegó el, a la postre, tanto del empate definitivo. Gibanel tiró a quemarropa e Iñaki realizó un paradón, pero el rechace lo aprovechó el punta axárquico Guerra para depositar el cuero en el marco malaguista.
Hasta el descanso el choque estuvo muy equilibrado con un cuadro visitante que supo contener el fútbol del Málaga sin desdeñar alguna incorporación en ataque.
Ya en el segundo período Muñiz quemó las naves, haciendo cambios ultraofensivos y buscando las 'cosquillas' al férreo entramado defensivo del 74, bien pertrechado atrás y muy peligroso a la contra, especialmente con un motivado José Juan Luque por izquierda.