LA COLUMNA DE TOMAS RONCERO

Tomás Roncero
EL ALEMÁN GANA POR ACLAMACIÓN

Si hoy se abriesen las urnas del Bernabéu para que los socios eligiesen a su entrenador ideal para el segundo proyecto de la era Calderón, Schuster vencería por mayoría aplastante. Llevo desde el 17 de junio (¡bendito alirón!) hablando con docenas y docenas de madridistas sesudos, apasionados, pragmáticos, optimistas enfermizos o escépticos. Mi sondeo sólo buscaba un punto de luz tras las tinieblas que sembró el Capellato, sólo desterradas por la conquista del título de Liga. La conclusión es reveladora: más del 80% de la Nación Madridista quiere ver a Schuster en el banquillo del Bernabéu el próximo 18 de agosto ante el Sevilla. La Supercopa espera y sería para Bernd un espaldarazo perfecto arrancar con un We are the Champions ante el mejor equipo del último curso.Schuster fue un genio en aquel Madrid imperial del récord de goles (107 en la temporada 1989-90) y la afición sabe que su paladar como técnico coincide con el que tenía como jugador. El Bernabéu quiere recuperar la bandera del fútbol. "En el Madrid no basta sólo con ganar, hay que hacerlo con grandeza", me decía Ángel Cappa hace poco en un Talgo Cáceres-Madrid. Con este alemán siento buenas vibraciones. No olviden que la Séptima se ganó con acero germano: Illgner y Heynckes. La Décima llegará con Schuster y Metzelder. Danke por venir, amigo Bernardo...