lunes, 7 de julio de 2008
¿Quién era?: Un piloto francés de los 80 y principios de los 90.
¿Por qué se le recuerda?: Por ser cuatro veces campeón del mundo y ser considerado uno de los mejores pilotos de todos los tiempos.
¿Qué fue de él?: Se retiró en 1993. Tras trabajar como comentarista de televisión y trabajar en Renault y McLaren, fundó su propio equipo de Fórmula 1, el Prost Team, que contó con pilotos como Jean Alesi, Jarno Trulli o Nick Heidfeld. El equipo entró en bancarrota en 2001. Ahora, Prost se dedica a participar en pruebas ciclistas y en pruebas de automovilismo sobre hielo, donde es uno de los mejores.
¿Sabías qué...?: Corrió en McLaren, en Renault y en Ferrari (¿pasará lo mismo con Alonso?).
- Prost es de origen armenio, por parte de madre.
- Fue legendaria su rivalidad con el desaparecido Ayrton Senna. Todo empezó cuando ambos compartieron equipo en McLaren, en 1989. En un par de carreras se enfrentaron por unas maniobras del brasileño para mantener la posición. Prost no sólo se cabreó con Senna, sino que la tomó con McLaren y con un tal Ron Dennis, a quienes acusaba de favorecer al legendario piloto de Sao Paulo. Esa polémica hizo a Prost anunciar su fichaje por Ferrari al año siguiente. Pero en la última carrera, en la que ambos se jugaban el título, volvió a liarse. Prost bloqueó a Senna, que pretendía adelantarlo, lo que provocó que el francés abandonara y que Senna tuviera que realizar una maniobra ilegal para volver a pista. Senna fue descalificado y Prost ganó el Mundial.
- Al año siguiente, Senna se vengó: El brasileño lideraba el campeonato por delante de Prost, ya en Ferrari. En la última carrera, Prost salió mejor que Senna y le adelantó, pero en la primera curva, Senna arrolló a Prost, los dos se quedaron fuera y el título se lo quedó el paulista.
- En 1993, Prost se marchó a Williams. En su contrato había una cláusula, incluida por Prost, que prohibía que Senna estuviera en su mismo equipo. Tanto es así que cuando la escudería británica fichó a Senna en 1994, Prost se retiró.
- En el Gran Premio de Brasil de 1993, Prost tuvo que ser protegido por la Policía para evitar los ataques de los hinchas brasileños.
- Senna murió, como los aficionados a la Fórmula 1 sabéis, en abril de 1994 tras estrellarse en Imola. A pesar de su eterna rivalidad, Prost fue uno de los pilotos que portó el féretro del brasileño en su funeral. Además, el francés declaró que con Senna "se había muerto una parte de él mismo".
- Hay otra emocionante anécdota en torno a la muerte de Senna. Prost se había retirado en 1993 y trabajaba de comentarista. Dos días antes de la muerte de Ayrton, en una de las sesiones de entrenamiento, el paulista le envió un mensaje a Prost: "Te echamos todos mucho de menos".
- Prost también estuvo enfrentado a Nigel Mansell cuando ambos corrían en Ferrari, porque el británico consideraba que Prost llevaba mejor coche.
- Mansell rechazó correr en Williams en 1993 con tal de no coincidir con Prost.
Biografía, palmarés, estadísticas: Alain Prost nació el 24 de febrero de 1955 en Saint-Chamond, Francia. Debutó en la Fórmula 1 a los 25 años, en 1980, en las filas del equipo McLaren. Entre 1981 y 1983 corrió en Renault. Del 84 al 89 estuvo en las filas de McLaren, de nuevo. En 1990 y 1991 formó parte de Ferrari. Tras un año sabático en 1992, retornó en 1993 para correr en Williams, donde se retiró. Prost ganó cuatro Mundiales (1985, 1986, 1989 y 1993). Corrió 202 grandes premios, consiguió 51 victorias, 33 'poles', 41 vueltas rápidas y 106 podios.
La historia está hecha para que algunos hombres la cambien. Manolo Santana fue pionero en 1966 y Rafa Nadal ejerció de sucesor 42 años después en el All England Club, la catedral del tenis. Hasta hoy allí reinaba un suizo llamado Roger Federer que parecía invencible, un extraterrestre con raqueta. Lo siguió siendo hasta la última bola de una final memorable, que duró casi cinco horas y que se vio retrasada e interrumpida dos veces por la lluvia. Jugaban dos campeones pero sólo podía ganar uno antes de que anocheciese en la final más larga de todo el torneo. 6-4,6-4, 6-7, 6-7 y 9-7 para Míster Nadal, el nuevo rey de Wimbledon.
El guión de la final que se había preparado Federer saltó por los aires en el tercer juego. Nadal logró el break y, desde ese momento, confirmó que no estaba dispuesto a perder por tercera vez una final de Wimbledon. El español comenzó a mover al pentacampeón suizo, que se sentía protegido con su volea perfecta en la red pero resultaba vulnerable con el revés. Las decisiones que tomaba el suizo en la pista no eran tan correctas como siempre, ni siquiera cuando pedía el ojo de halcón. No parecía el día de Federer, que dejó pasar casi todas las oportunidades que tuvo para romper el servicio de su rival y eso le costó la final. La primera nada más perder el suyo, y la siguiente en el juego clave de la primera manga con 5-4 en el marcador. El suizo dejó pasar dos bolas de break y acabó perdiendo el primer set, algo que nunca le había sucedido ante Nadal en una final de Wimbledon.
El contratiempo pareció reactivar a Federer, que empezó a sacar mejor y a ganar su servicio con facilidad. Incluso se quitó la espina del primer set con un break (el único del partido) en el arranque del segundo set que hacía vislumbrar un empate antes del inicio del tercero. Sin embargo, con 4-2 en el marcador, apareció el gran Nadal para darle la vuelta al partido y poner el trofeo más cerca de su silla. Dos breaks para el balear y mismo escenario que en el primer set, con Federer desaprovechando de nuevo la oportunidad de salvar el set.
Federer resucita con la lluvia
Al suizo le quedaba por delante escalar el Everest si quería ser campeón por sexto año consecutivo. Necesitaba su mejor tenis y una sobredosis de moral para lograrlo ante un Nadal que parecía intocable. Otras cuatro bolas de break salvadas con 2-1 y 3-2 desquiciaron a Federer, que estuvo a punto de hundirse definitivamente en el séptimo juego del tercer set. Pero Federer es mucho Federer y tiró de orgullo para levantar tres bolas de break que le condenaban a la derrota con 3-3 en el marcardor.
Superado el mal trago se colocó con 5-4 a su favor antes de que la lluvia, siempre invitada de honor en el All England Club y que ya había retrasado el comienzo del partido, interrumpiese de nuevo la final durante una hora eterna. Nadal tenía el título a su alcance pero la ceremonia de sucesión debía esperar porque delante estaba Federer, que si ha ganado cinco veces Wimbledon será por algo.
Con la final perdida se recuperó y se apuntó el tercer y el cuarto set en dos dramáticos tie-breaks que prolongaron el desenlace de uno de los grandes partidos de la historia del tenis hasta la eternidad.
Quinto set dramático
Lo que se vivió en el último set de la final fue sencillamente increíble. Con 2-2 en el marcador vuelve la lluvia y otra vez jugadores a vestuarios, con el riesgo de que el partido no pudiese concluir este domingo por falta de luz. Finalmente, el tiempo fue benévolo y respetó el desenlace de una jornada histórica para el tenis.
Federer y Nadal no hicieron concesiones y ganaron sus servicios religiosamente, con más dificultades para Federer que para Nadal. Como no había tie-break hubo que llegar hasta el decimosexto juego para conocer al campeón. Un break con 7-7 en el marcador puso al tenista español a las puertas de la gloria en la hierba de Londres.
Puntos dramáticos, deuce, punto de partido para Nadal, Federer que agota su última vida, ventaja para el español y último peloteo que acaba con un golpe de Federer en la red y con Nadal tirado en el suelo. La guerra de sucesión en Wimbledon había terminado.